Mantener nuestra propia dentadura el mayor número de años posible es ahora uno de los objetivos de todos los especialistas. La opción de las dentaduras postizas, completas o solo de algunas piezas, solo se plantea para casos realmente excepcionales.
Para conservar todos nuestro dientes no solo debemos realizar un seguimiento y cuidado de los mismos. Hay otros elementos que juegan un papel igualmente protagonista y que merecen, por tanto, el mismo interés por nuestra parte. Nos referimos esencialmente a las encías, que son las encargadas de mantener fijas las piezas dentales. Si se debilitan o enferman, la consecuencia puede ser la pérdida de dientes que, en muchos casos, están en perfecto estado.
De ahí que la Periodoncia, la especialidad que se ocupa precisamente del cuidado de las encías, esté cobrando tanta importancia en los últimos años. Además, también se ocupa de los huesos en los que van enclavados los dientes. Es evidente, pues, el papel esencial que estos profesionales tienen para ayudarnos a conservar nuestra boca en perfecto estado el mayor tiempo posible.
La enfermedad más grave y peligrosa que puede afectar a las encías es la periodontitis, coloquialmente conocida como piorrea. En los casos más severos, esta dolencia puede hacer que perdamos todos y cada uno de nuestros dientes. Es esencial que nos hagamos una revisión anual para comprobar el estado de nuestras encías.
Pero hay más patologías que trata la Periodoncia entre las que destaca la gingivitis, o inflamación de las encías. Uno de los síntomas que la hacen más visible es el sangrado de las encías y notar que alguna pieza dental se mueve.
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